Yo te amo, pero tú no
Yo te quiero, pero tú no
Yo te deseo, pero tú no
Yo te abrazo, pero no estás
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Teoría del poema, escudo, dada su brevedad: el poema manifesta una tibia tristeza ante un imposible. La ausencia y la duda de la genuinidad de sus palabras convierten al autor en una suerte de hipócrita o mala persona, sólo por defender los valores del amor genuino. Con esto quiero decir que, pese a que mi poema está escrito con palabras sencillas, el vacío que existe está no en su falta de vehemencia sino en su falta de entendimiento. El amor romántico no exitste, okey. ¿Pero entonces el amor que sentimos el uno por el otro es sólo ficción entre dos personas que no se conocen? Me parece una posición cobarde de la vida. Sin embargo, no ensuciemos un bello poema con bilis innecesaria, lo único que importa del poema es que Yo, autor, amé, y eso, pese al capricho de la geografía, no me impidió disfrutar de la vida. No huí. Ni tampoco usé a nadie. Resulta que ahora los que llevan la máscara para ser suficientes en el puto mundo son los que triunfan. Pues no me parece bien, y con el gesto serio, recordándote, escuchando a Lana del Rey, sé que me amabas; pero que, obviamente, para ti, yo, o era una máscara, o estaba podrido, o simplemente, aunque arda, no era lo suficientemente bueno para ti. Touché, mi amor, cuídate: porque te quiero.